Pasando por Bélgica en mi camino a los Países Bajos este fin de semana, un artículo en la edición de fin de semana del periódico local De Standaard llamó mi atención. "Franse bioscoopreus Pathé keert na eeuw terug naar Vlaanderen" no solo marcaba un notable regreso estratégico de un importante actor del cine europeo al mercado local, sino que también me hizo sentir optimista sobre el futuro de la exhibición cinematográfica en Europa en general.
El artículo señala que el panorama cinematográfico europeo está experimentando una transformación significativa mientras el gigante francés de la exhibición Pathé Cinémas orquesta un regreso estratégico a Bélgica después de lo que fue efectivamente una ausencia de un siglo (!). Este movimiento, que comienza con la transformación del multicine Euroscoop en Genk, representa más que una simple transacción comercial: es efectivamente una declaración sobre el futuro potencial de la exhibición cinematográfica en Europa.
Contexto histórico y estrategia actual
Pathé's en Belgica es profunda. El Ciné Pathé en Amberes fue una vez una joya de la corona del cine temprano, y el Pathé Palace en Bruselas, que data de 1913, se erige como testimonio de la importancia histórica de la empresa. Hoy, operando 127 cines en varios países, Pathé sigue siendo una fuerza dominante en la exhibición europea, particularmente en Francia y en el vecino de Bélgica, los Países Bajos. Su regreso a Bélgica no es solo nostalgia, es una expansión estratégica.
La transformación del mercado belga
Los planes de Pathé para su actual operación en Bélgica involucran varios elementos clave:
- El cambio de marca de múltiples ubicaciones bajo la bandera de Pathé (¡tenía 10 cines bajo seis nombres diferentes!);
- Una inversión de más de 10 millones de euros en modernización;
- Consolidación estratégica de locales más pequeños, incluido el cierre de ubicaciones en Libramont y Marche-en-Famenne;
- Un programa integral de renovación centrado en mejorar la experiencia del visitante.
Aquellos que han visitado los multicines de Pathé en Francia o los Países Bajos sabrán qué esperar (vea mi Cinema of the Month: Pathé Beaugrenelle – Paris, France de febrero de 2020, por ejemplo), que es una experiencia increíble, o son testigos de las sumas gastadas en renovar y mejorar el hermoso Pathé Royal Theatre Tuschinski de Ámsterdam (en el que CinemaNext estuvo estrechamente involucrado).
Desafíos y oportunidades del mercado
l momento de este movimiento es particularmente intrigante. La asistencia al cine belga muestra tendencias desafiantes, con visitas per cápita más bajas que otros mercados europeos, con solo 1,1 visitas por año [en realidad 1,4, como me informan de manera confiable]. Sin embargo, el liderazgo de Pathé ve esto, de manera reveladora, como una oportunidad en lugar de un elemento disuasorio. Según su dirección belga, la recuperación de la pandemia está en marcha, con cifras de asistencia que muestran un impulso positivo.
Integración digital y visión futura
Lo que distingue a esta expansión es el enfoque holístico de Pathé hacia el entretenimiento:
- Éxito reciente con grandes estrenos como "El Conde de Montecristo" y "Monsieur Aznavour";
- El lanzamiento de su plataforma de streaming "Pathé Thuis" en Bélgica;
- Planes para "Pathé Home" en Francia, demostrando su estrategia multicanal;
- Uso de plataformas de streaming para dar una segunda vida a películas más antiguas, conectando eficazmente el cine tradicional con la distribución digital y la 'segunda vida' de películas que anteriormente eran para tiendas de video.
Panorama competitivo
El movimiento no está exento de riesgos, ya que el mercado belga presenta algunos desafíos únicos:
- Fuerte presencia del líder del mercado Kinepolis en ubicaciones privilegiadas;
- Necesidad de un posicionamiento cuidadoso para evitar la competencia directa, con Kinepolis ya presente en la mayoría de los centros de las ciudades;
- La oportunidad de diferenciación a través de experiencias premium tiene un costo;
- Enfoque en la comprensión y programación del mercado local, siendo Flandes muy diferente de la Valonia francófona y del Bruselas mixto/cosmopolita.
Implicaciones estratégicas para la exhibición europea
Dando un paso atrás y mirando el panorama general más allá de los campos cinematográficos de Flandes, este movimiento de Pathé ilustra varias tendencias clave que están remodelando el cine europeo, lo que debería dar motivos para el optimismo en general:
- Los grandes operadores ven valor en la expansión territorial a pesar de la competencia del streaming;v
- La inversión en infraestructura física sigue siendo crucial para el éxito a largo plazo;
- Los modelos híbridos que combinan distribución teatral y digital se están convirtiendo en estándar;
- El capital de marca histórico puede aprovecharse para el posicionamiento en el mercado moderno.
Pathé no gastaría 10 millones de euros en un mercado con un promedio de 1,1 [en realidad 1,4] entradas anuales al cine si no creyera seriamente que existe potencial para el crecimiento orgánico. Como Bram van den Broek deja claro en el artículo, "Todavía hay espacio para más cine, pero no vamos a ser competidores directos en batalla con Kinepolis". El cine europeo no tiene que ser una lucha de suma cero por un pastel que se reduce; invertir en cine es invertir en el crecimiento futuro del mercado.
Mirando hacia adelante
El regreso de Pathé a Bélgica puede representar así una tendencia más amplia de operadores históricos que reafirman su presencia en mercados europeos clave. El éxito de esta empresa probablemente dependerá de:
- Modernización efectiva de las propiedades adquiridas;
- Programación estratégica que equilibre blockbusters con películas locales;
- Integración de ofertas digitales y teatrales;
- Construcción de lealtad del cliente en un mercado competitivo;
- Uso innovador de nuevas tecnologías (IA) y ofertas premium, combinado con un excelente servicio.
Como uno de los operadores de cine más antiguos y con más historia de Europa, el audaz movimiento de Pathé de regresar a Bélgica podría sentar un precedente para expansiones similares en todo el continente. Su estrategia de combinar las fortalezas de la exhibición tradicional con la innovación digital bien podría convertirse en un modelo para operadores de cine en todo el mundo.
El regreso de Pathé a Bélgica: El gigante histórico del cine realiza un regreso estratégico